01 Mar ¿Quién tiene la culpa de esta crisis?

La palabra culpa como “droga psicolingüística”

Estamos viviendo una pandemia, lo que significa no solo una situación sanitaria, sino una amplia crisis de gran proporción que involucra la economía mundial, las tensiones políticas, sociales, el desequilibrio ecológico y mucho más. Sin duda, estamos en medio a una gran crisis. Sin embargo, existen caminos muy diferentes para gestionar los recursos que tenemos y poder salir de manera inteligente de esta situación. Esta guía trata de una de esas diferencias radicales, de aprender a identificar patrones culturales (“paradigmas” en lenguaje más académico), muy diferentes de percibir, entender y enfrentar la actual crisis.

Aquí te dejo algunos Tips para superar el paradigma del miedo colectivo generalizado, hacia soluciones nacidas desde la calma, la serenidad y la inteligencia

El poder de la palabra “CULPA” en nuestra vida cotidiana. 

Durante siglos la cultura occidental ha incorporado esta palabra no solo al imaginario colectivo de los ciudadanos, sino también en la vida social, la política, el derecho y la justicia, así como la religión. La CULPA es parte de nuestra manera de vivir la realidad. 

¿Cuándo utilizamos esta palabra? Cómo se observa ya en las respuestas del diccionario, se utiliza para explicar la causa de algún mal o perjuicio, es parte de nuestra reacción cultural ante algún hecho entendido como “dañoso” o injusto.

Un ejemplo más “light” lo podemos observar en el fútbol u otros deportes masivos, y el fenómeno es prácticamente el mismo. Imagine usted en el estadio alentando al equipo de sus pasiones. Pero finalmente su equipo pierde, y pierde feo.  La galería a su alrededor llena de rabia, frustración ante la derrota y hasta que alguien grita y plantea la pregunta tóxica, la pregunta virulenta ante un grupo en crisis… 

¿QUIÉN TIENE LA CULPA DE ESTO??!! Las emociones se agitan, las personas comienzan a expresar argumentos, rabia, apuntan nombres y situaciones… ¿Cuáles son los “culpables” preferidos por la galería?

El ÁRBITRO ES UN LADRÓN VENDIDO!! NOS HA ROBADO EL PARTIDO!!

Echarle la culpa al árbitro es un gran clásico del fútbol y de su psicología social. Es la figura “fetiche” por excelencia, el “puching ball” para descargar la furia y sentarnos por un instante en la comodidad de las víctimas, atropelladas por una injusticia azarosa que cae desde afuera. Sabernos víctimas del destino injusto y abrazarnos para sufrir juntos la pena, es también parte del alivio que permite la palabra culpa sobre este personaje del fútbol (y los guardalíneas incluidos).

Sin embargo, hay veces en que nuestro equipo de verdad juega muy mal, y por lo tanto, ya no es tan fácil desviar la atención hacia el árbitro. Y entonces la masa en la galería furiosa y frustrada ante la derrota humillante…  

¿A quién echamos la culpa ahora?

• El ARQUERO ES UN FLOJO!!! Cámbienlo ahora!!

Lamentablemente, en la psicología social del fútbol, el arquero es la segunda alternativa más a mano para desahogar la furia de la masa y volver a ubicarnos en el lugar de víctimas. Luego, si los problemas del equipo continúan…

• FUERA EL TÉCNICO!!!

Y luego podemos incluir al defensa u otros candidatos a culpables, los dirigentes, las barras bravas, el gobierno, y más. El tema será siempre el mismo:

LA PALABRA CULPA ES PARTE DE UNA ADICTIVA CONVERSACIÓN QUE SOLO SIRVE PARA CREAR UNA EXCUSA PSICOLÓGICA Y ASÍ PODER DESCANSAR COMO VÍCTIMAS DE LOS HECHOS QUE NOS SUCEDEN EN LA VIDA.

Todo lo dicho anteriormente sobre el fútbol, se aplica a los grupos humanos en general. Es decir, la palabra culpa es parte de la conversación familiar, entre los vecinos, en toda la sociedad se utiliza esta palabra sin reflexionar en su impacto y su limitación. La más importante, la podemos observar al entender la palabra culpa como parte de la cultura.

En tal sentido, cuando una pareja, una familia o un grupo de personas lo está pasando mal, viviendo una crisis. De pronto aparece alguien y plantea la pregunta venenosa…  “¿Quién tiene la culpa?”. Automáticamente la tentación cultural será responder la pregunta y apuntar a alguien o algo como culpable de turno. 

Y se repetirá el mismo fenómeno del fútbol. Al culpar a alguien o algo (incluso si nos “culpamos” a nosotros mismos!), esta palabra crea la excusa psicológica para que alguien descanse en el lamento de las víctimas. La culpa la carga alguien por el grupo, como en el famoso fenómeno del “chivo expiatorio”, descrito en psicología social y antropología. ¿Cómo salir de esta adictiva conversación?

Buenas noticias!!: 

La palabra CULPA tiene una palabra ANTÍDOTO: 

Palabra que invita al cambio de paradigmas

¿Cuál será entonces esa “palabra liberadora”?

Al contrario, la palabra que inaugura un nuevo paradigma es RESPONSABILIDAD. 

Sin embargo, no basta con solo cambiar la palabra!, pues se requiere también un cambio profundo al nivel de las emociones y la percepción de la realidad.

Conozcamos algunas de las principales diferencias entre la cultura de la CULPA versus la cultura de LAS RESPONSABILIDADES.

La PSICOTERAPIA y el ENEAGRAMA cómo impulsos para vivir en la responsabilidad de ser plenos y felices.

Tengo años de experiencia abundante acompañando procesos de cambio existencial mediante la psicoterapia. En el proceso terapéutico, también ayudamos a ir superando estas creencias limitantes sobre las culpas que pesan para algunas personas, respecto a alguna situación difícil en la vida. 

Al contrario, la psicoterapia presencial u Online, se orienta a generar procesos de autoestima, confianza y empoderamiento de la vida, mediante diálogos sanadores que permitirán poder conocer y practicar este nuevo paradigma de asumir la plena responsabilidad ante la vida.

La psicoterapia es una experiencia de profunda transformación a nivel mental, emocional y comportamental. Es un proceso solo para valientes, que deseen conectar directamente con la intuición y sabiduría sanadora de nuestro Ser.